Aquella Semana Santa en Galicia....! lunes, 5 de abril de 2004
<<<<<<<<<<<<<<<< Nunca tan cerca de ti yo me sentí como cuando limpiando las rocas de la playa, bajo la lluvia finalicé el sendero orando, inundada de fe mi alma y de amor hacia ti, por la magistral belleza de esta Obra Maravillosa que es esta Costa Gallega, obra de tu Mano Grandiosa; ¡ Aquellos días...el Sol no hallé sólo nubarrones grises y negros!, pero a ti... te he encontrado, triste, herido y dolorido, humillado y despreciado, maltratado y vejado, y yo que llegué para estar a solas con mi Mar, me puse a llorar meditando en ti y en esta maravilla que es el amado mar de la bella Galicia, en silencio, viví el terrible dolor de sus gentes y tu pasión y muerte, en esta Semana Santa, he recordado... la oscuridad que cayó sobre la Tierra desde la hora sexta hasta la nona, cuando tú Señor clamaste... “ É-li É-li lá-ma sa-bajthá- ni “ Entonces – confieso- que sentí miedo, con las olas traté de hablar, al encuentro de los vientos acudí mostrando mis sentimientos sin vanidad ni oropel a solas con el inquieto tropel de los pensamientos. Recordé todo lo que a ti te hicieron penar: Te colocaron la corona de espinas, Empaparon una esponja en vinagre y te dieron a beber, con una lanza atravesaron tu costado, y salió sangre y agua, de nuevo clamaste al Cielo y cedió tu espíritu. La cortina del templo se rasgó en dos, la amada Tierra tembló, las masas rocosas se hendieron, y muchas tumbas se abrieron, muchos santos salieron y todos los que te vigilaban al ver el terremoto, y las cosas que sucedieron... Fueron presos de miedo, gritaron y dijeron ¡ Ciertamente era el Hijo de Dios! Pronto las mujeres te velaron, pronto tu cuerpo fue envuelto en lino fino, muy pronto el ángel del Señor hará rodar la piedra y se sentará sobre ella, con apariencia de relámpago y blancura de nieve, dirá a las mujeres: - No teman, Él no está aquí, porque ha sido levantado, - de entre los muertos .Vayan de prisa y digan a sus - discípulos que vayan a Galilea... - que allí lo verán, sentado a la diestra del Padre He llegado a creer que por eso el mar rugía, del Cielo llovía y el sol no brillaba, y que por eso la inmensidad de esta agua rocas, aves y peces, por la tristeza y miseria de sus gentes se había vestido de negro, por eso las cumbres de sus bellas Montañas bosques y valles vestían velos grises, porque habían, al dulce Cordero, inmolado en un leño... *^^* Costa da Morte Galicia ( España) 18.04.03 --<-<-@ ¡ Me voy unos 15 días de vacaciones, a todos deseo, que esta Semana Santa del 2004, les aporte Paz y Calma Para el alma.! . * A N N
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