Sabré que es llegada la hora...

domingo, 20 de marzo de 2005








Ay Amor, si me  puedes curar
¡cúrame!
Si,  no puedes curarme
¡cálmame,!
Si  no puedes calmarme
¡consuélame...!

Si no deseas  curarme, calmarme
o consolarme...
entonces...¡ Ten piedad !  
¡ Maldíceme!

Y sabré que es llegada mi hora.
¡ Ah,  dulce,  piadosa hora,
para tan rabioso  dolor
apaciguar...
Ah, benévola,  clemente hora,
para el olvido
alcanzar..
para, de tu lado,
ya sin memoria,  marchar... !

Mágica hora
dulces minutos,  segundos,
de radiante,  diáfano esplendor;...
bellas agujas de luminosa gloria,
espléndido tic tac de indoloro fulgor.

¡Ah,  me difuminaré en el  tiempo
entre  chispas, luciérnagas,
estrellas...!
¡ Ah, presto me volveré,
polvo amoroso de quimeras
de tal guisa,  despediré
esa inenarrable, para mi.. postrera,
e inolvidable hora de  
Amor... !

   *

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